Valentina Tereixkova

Ingeniera Espacial

El 16 de junio de 1963, a las 9.29 UTC, despegó desde la base espacial de Baikonur la nave Vostok-6, tripulada por Valentina Tereshkova, Chaika (esta última palabra, que significa ‘gaviota’, era su nombre en clave), de solo 26 años, que se convirtió así en la primera mujer astronauta de la historia: «Aquí Chaika. Veo el horizonte, una banda azul claro. Ahí está la Tierra, ¡qué hermosa es! Todo marcha espléndidamente».

Cerca de ella orbitaba la Vostok-5, pilotada por el astronauta Valeri Bykovski y enviada al espacio dos días antes.

Valentina condujo la nave durante 71 horas, es decir, 3 días, superando así en un 50% el tiempo sumado de todos los astronautas norteamericanos que habían circunvolado el planeta. Y durante todo ese tiempo realizó numerosas pruebas y experimentos e incluso evitó una desgracia al percatarse de que la nave estaba programada para alejarse de la tierra y no para acercarse. Y todo ello sin ninguna experiencia previa como astronauta.

Valentina llegó al espacio desde el cielo. Nacida el 6 de marzo de 1937 en la región de Yaroslavl de Rusia, dejó la escuela con 16 años para trabajar en una fábrica textil y de neumáticos. Aficionada apasionada al paracaidismo durante su juventud, fue su afición al cielo la que le llevó a ser reclutada para un experimento: un análisis comparativo de los efectos del vuelo espacial en hombres y mujeres. Las naves rusas Vostok no tenían dispositivo para aterrizar, por lo que el astronauta era eyectado a 10 km del suelo y debía descender el tramo final en paracaídas.

Valentina fue seleccionada entre 400 aspirantes, tras pasar una dura serie de pruebas físicas, intelectuales y técnicas, para recibir una dura preparación en el Centro de Entrenamiento para Cosmonautas (el TsPK), en las afueras de Moscú.

Los efectos del vuelo espacial no mostraron diferencias entre hombres y mujeres, pero lamentablemente sí hubo diferencias terrenales entre los tripulantes de las dos naves Vostok. Hubo acusaciones de propaganda por parte de los americanos, que consideraban absurdo poner una mujer en el espacio; hubo también falta de confianza por parte del director del programa espacial soviético en Valentina por el hecho de ser mujer, y no se le permitió coger los mandos del aparato, tal y como estaba previsto, al detectar que no podía enderezar la nave, aunque al final el problema resultó ser un fallo en la programación. Hubo también acusaciones de debilidad y burlas cuando confesó que los tres días que estuvo en órbita se los pasó vomitando y con malestar por el efecto de la falta de gravedad; los mismos que se burlaban de ella alababan la resistencia de su compañero por aguantar malestares similares. Y aun así, en ningún momento dejó de mantener el cuaderno de bitácora, de sonreír a cámara y de tomar fotografías del horizonte que luego ayudaron a descubrir, por ejemplo, los aerosoles atmosféricos.

A su regreso, Valentina Tereshkova fue nombrada Héroe de la Unión Soviética, y distinguida con la Orden de Lenin, pero aunque estaban previstos más vuelos en los que participaran mujeres, tuvieron que pasar 19 años hasta que otra mujer viajara al espacio. Ninguna de sus compañeras de entrenamiento lo hizo jamás, ya que fueron olvidadas y relegadas tras las acusaciones americanas de utilizarlas solo como propaganda. Valentina nunca lo aceptó, y en varias ocasiones declaró: “Llegamos como paracaidistas, pero nos convertimos en cosmonautas”. De las 525 personas que han viajado fuera de nuestro planeta, solo 56 son mujeres.

Valentina estuvo adscrita al programa espacial hasta el año 1997, estudió en la Academia de la Fuerza Aérea de Zhukovski y se graduó como ingeniera espacial en 1969. Obtuvo rangos militares hasta llegar a coronel. Formó parte de numerosas organizaciones de su país, como el Comité de Mujeres Soviéticas o el Centro Nacional de Cooperación Internacional y Cultural. También ocupó diversos cargos políticos en la URSS. Desde todas estas atalayas, al igual que hizo desde la órbita terrestre, sigue defendiendo la igualdad entre hombres y mujeres en el planeta Tierra.


Artista: Alba Trench

Ubicación: Universitat Politècnica de València. Vestíbulo del edificio Nexus. Camíno de Vera, s/n, edifici 6G

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